El verano de 1979 cambió para siempre la historia del baloncesto americano. A partir de ese momento el baloncesto estadounidense se convirtió en un espectáculo rentable a nivel económico. Las canchas vacías pasaron a estar abarrotadas y a tener espectadores de lujo procedentes del mundo del cine como Jack Nicholson (hincha de los Lakers) o Woody Allen (un habitual en los partidos de los New York Knicks en el Madison Square Garden) y el fenómeno de la NBA traspasó las fronteras norteamericanas, nueva camiseta del barça 2022 23 provocando que los aficionados europeos al baloncesto trasnocharan para seguir a los mejores jugadores del mundo.